Los costes laborales empiezan a despertar en España
Artículos, 02 de mayo de 2016
Tras cuatro años de estancamiento, los costes laborales en España han empezado a moverse aunque sin excesivo ímpetu, según lo reflejan las últimas cifras facilitadas por Eurostat, que apuntan que durante 2015 se alcanzaron los 21,2 euros por hora trabajada, un 0,3% más que el año anterior, porcentaje menor en comparación con el incremento medio del 1,5% de la Eurozona.
Los datos anuales de Eurostat se verían confirmados por los del Instituto Nacional de Estadística (INE) que revelan que en el último trimestre del pasado año el alza de los costes laborales por trabajador, tanto en lo que respecta a los costes laborales totales (que incluye las cotizaciones a la Seguridad Social y otras partidas menores) como en los costes salariales brutos (sin descontar impuestos), subió el 1,2% entre octubre y diciembre, porcentaje que contrasta con el aumento medio experimentado durante 2015 en Alemania (2,4%) o en Portugal (1,4%). Las cifras del INE para el primer trimestre del 2016 confirmaran la tendencia al alza.
Los costes laborales suelen convertirse en un sempiterno tema de debate y confrontación en el mundo de la economía ya que, mientras hay un sector que defiende su aumento, en tanto en cuanto generaría una dinamización del consumo y por ende del crecimiento económico, otra parte defiende su estabilización, en la medida en que un incremento repercutiría negativamente en la competitividad exterior que ha permitido a España conseguir registros record en sus exportaciones.
Aunque en algunos círculos empresariales se manejan esos temores relacionados con la pérdida de la competitividad, lo cierto es que son muchos más los que consideran infundadas esas preocupaciones, ya que España sigue ocupando puestos de cola en cuanto a costes laborales se refiere y frente a los poco más de 21 euros por hora trabajada, Francia supera los 35, Alemania los 32, Dinamarca los 41, Bélgica los 39, Italia los 28 o el Reino Unido los 25.