Los mercados cuestionan ahora la idoneidad de la subida de tipos de la Fed en diciembre
Análisis, 01 de marzo de 2016
La decisión de la Fed norteamericana, con su presidenta Yellen a la cabeza, de aprobar, a mediados de diciembre del pasado año, una subida de los tipos de referencia, por primera vez en nueve años y que ponía fin a una política monetaria heterodoxa y expansiva sobremanera, consistente en la compra de activos, no estuvo exenta de fuertes controversias entre monetaristas y financieros sobre la idoneidad de la medida.
Desde entonces, la desaceleración de China, el debilitamiento de las economías emergentes, el abaratamiento de las materias primas y el temor a una desaceleración global, han complicado la decisión de Yellen y han venido a dar la razón a quienes defendían el mantenimiento durante más tiempo de la era Bernanke y de sus fundamentos.
Las dudas sobre la idoneidad de la medida de la Fed no está exenta de una dosis fuerte de realismo, aunque en la ciencia económica no existe la exactitud y todo es susceptible de ser gestionado según los elementos que se incorporen a la ecuación.
Así, una simple comparación de datos, demuestra que si se analiza la situación económica de EEUU en los últimos tres períodos de subidas de tipos, se comprueba que, de media, el PIB estaba creciendo a 4%, el IPC se encontraba en 2,5% y la tasa de paro era de 5,5%. Sin embargo, tras la decisión de Yellen la economía crece al 2%, el empleo mejora pero sin presiones salariales y la inflación sigue muy baja.
Además, no se puede descartar que las turbulencias en los mercados financieros terminen por contagiar a la confianza y a la economía real, por lo que muchos analistas de referencia no descartan que se produzca una sola subida adicional en el último trimestre del año.