La despedida triunfal de Obama

Análisis, 19 de marzo de 2016

EEUU está en expansión y este año electoral su economía será uno de los motores de la demanda mundial. Pese a ello, los signos de que pudiera haber una inflexión en su ciclo económico causan preocupación y se considera que ha sido uno de los factores detrás de las caídas recientes de los mercados financieros.

Dos parecen ser los ámbitos de preocupación que los analistas han decidido someter a un intenso seguimiento.

El primero, la proyección del sector industrial hacia el resto de la economía, teniendo en cuenta que la industria sufre un shock negativo severo por la caída del petróleo y la apreciación del dólar. El segundo, detectar si el ciclo del crédito está cambiando.

Los datos parecen concluyentes y la recuperación del ISM manufacturero en febrero es una buena señal, como lo es la resistencia del ISM de servicios en niveles compatibles con la expansión. Además, la evidencia de que los sectores industriales, ligados al consumo, sigan en positivo, apoya la tesis de que la expansión se sostiene.

Respecto a las alarmas en torno al crédito y con la debida cautela, todo parece indicar que los temores resultan exagerados, ya que el crédito bancario a empresas fluye; los signos de endurecimiento se concentran en empresas del sector energético, mientras el crédito a familias incluso se acelera.

Post-it

ISM.- El índice Institute for Supply Management (ISM) muestra una perspectiva anticipada sobre la fortaleza del sector manufacturero en EEUU. Se calcula a partir de una encuesta realizada a más de 300 empresas de más de 20 sectores distintos relacionados con la actividad manufacturera, y diversificados por la aportación de cada uno de ellos al PIB. Abarca indicadores como nuevos pedidos, producción, empleo, inventarios, plazos de entrega, precios, pedidos de exportación y pedidos de importación.

El propio dato del ISM en bruto puede indicarnos hacia dónde va la economía del país. Un resultado superior a 50 puntos mostraría un sector manufacturero en expansión, mientras que, de situarse por debajo de los 50 puntos, indicaría una desaceleración del sector. Cabe recordar que para hablar de recesión de la economía en su conjunto, el indicador debería alcanzar un valor por debajo de 42.

Fuente: Tendencias del Dinero