Telefónica arroja la toalla

Artículos, 01 de noviembre de 2016

Como no era cuestión de vender y vender activos para reducir deuda en un mercado que no se ajusta a las exigencias de Telefónica, la multinacional española ha decidido modificar su política de dividendos para este ejercicio y el siguiente y, como suele ocurrir cuando se toca el bolsillo de los accionistas, sus títulos reaccionaron con una caída del 4%, derrumbe que puede ser transitorio en opinión de analistas de referencia a pesar de la debilidad de los resultados conseguidos.

La compañía ha decidido repartir 0,55 euros por acción en 2016, desde los 0,75 euros previstos inicialmente, mientras que en 2017 la retribución ascenderá a 0,40 euros por acción.

Hay que recordar que hace tan sólo unas semanas la compañía tuvo que abandonar su intención de sacar a bolsa una participación minoritaria de Telxius y la OPV de O2 parece cada vez más lejana.

La deuda de Telefónica al final del tercer trimestre, desde finales de junio, se ha reducido en 2.584 millones de euro (-5%) hasta quedar en 49.984 millones, lo que está muy alejado del objetivo a medio plazo de la compañía.

En los nueve primeros meses del año, Telefónica ha ganado 2.225 millones de euros, un 22% menos que en el mismo periodo del año anterior, y aunque los ingresos se han recortado un 6,7%, hasta los 38.315 millones de euros, su beneficio se ha disparado un 38,5% en el tercer trimestre.

El presidente Álvarez Pallete ha puesto de relieve que el objetivo de este cambio en la política de dividendos es “fortalecer el balance, acelerando sustancialmente la reducción de deuda por la vía orgánica” y “remunerar de forma atractiva al accionista, con una rentabilidad por dividendo consistente con el mercado y un payout sostenible”.

El escenario internacional para Telefónica es complejo y, sin duda, seguirá afectando a los resultados futuros de la compañía cuyos ingresos en Españ,a en este último trimestre, experimentaron una ligera caída del 0,4% en contraste con la buena evolución del primer semestre ( 5,4%).

Así, Reino Unido y Alemania siguen muy penalizadas por la falta de ofertas integradas fijo-móvil frente a sus principales competidores, lo que se refleja en que sus ingresos caen, respectivamente, un 17 y un 15,2%. En el caso de Reino Unido, sus resultados están igualmente penalizados por la depreciación de la esterlina post-Brexit. Brasil, por su parte, muestra un buen comportamiento ( 5,9%) gracias en parte a la apreciación del real y a la debilidad de sus competidores. En el resto de Latinoamérica los ingresos caen casi un 14%.

Fuente: Tendencias del Dinero