¿Preocupación por la bolsa china?… y ¿por qué no por la española?

Análisis, 10 de julio de 2015

La prensa económica española, tan dispuesta en ocasiones a hacer seguidismo de la británica, se hacía eco la semana pasada de la espiral bajista que la renta variable china estaba experimentando en la últimas semanas y que habría llegado a caer un 30% en ese periodo de tiempo, como consecuencia de movimientos especulativos de origen y causas diversas. Pese a todo, el MSCI China ofrecía una rentabilidad durante los primeros seis meses del año del 12,61%, mientras el índice Shanghái A ofrecía una rentabilidad cercana al 19% al termino del semestre.

 

 

Frente a ese grado de preocupación mostrado por la prensa salmón española, no resulta fácil encontrar similar nivel de intranquilidad ante el hecho de que el IBEX 35 se esté moviendo en la frontera del 5% de rentabilidad cuando se ha superado el ecuador del ejercicio, porcentaje que podría ser tanto o más preocupante que la oscilación china si se compara con los resultados de bolsas europeas como la alemana (13,2%), la francesa (13%) o la italiana (19,0%), tanto o más concernidas por la crisis griega que la española. El Eurostoxx50, índice que recoge las acciones más grandes y más líquidas de la eurozona, terminaba el semestre en la frontera del 10% de rentabilidad.

Como es bien es cierto que el que no se consuela es porque no quiere, la bolsa española puede sentirse razonablemente satisfecha si se compara con los índices sajones Footsie100 (1%), SP500 (0,9%) o Dow Jones Ind. (-0,5%), aunque el NASDAQ ofrecía una rentabilidad del 4,7% al inicio de la segunda mitad del año.

Fuente: Tendencias del Dinero