El proceso de concentración bancaria ha experimentado en los últimos meses un impulso notable tras la operación CaixaBank-Bankia y ha abierto la veda para otras operaciones similares que ya están anunciando o proyectando otras entidades financieras como Unicaja, Liberbank o Ibercaja, entre otras. Además, la digitalización se ha hecho normal en el negocio bancario, lo que permite que múltiples operaciones no dependan de una oficina física para ejecutarse y entidades financieras que no tienen previsto entrar en procesos de fusión tienen también planes concretos de reducción de su red comercial de oficinas cara al público. Sumados esos dos elementos, en los próximos meses es previsible que el mapa bancario español sufra una disminución de más de 5.000 oficinas.

El resultado más inmediato, junto con las restricciones evidentes en la competencia en un sector históricamente singular en este sentido, es un previsible incremento de la brecha financiera en España, al ampliarse el número de poblaciones y ciudadanos que no tendrá acceso directo a servicios bancarios presenciales, desde un simple cajero automático a otros servicios más complejos.

Hace un año el Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía Aplicada publicó un primer análisis sobre la brecha financiera en España se señala que en el horizonte de 2025 el 5% de la población no tendría acceso a servicios bancarios esenciales, entre ellos el más básico de poder acceder a dinero en efectivo depositado por el cliente en la entidad bajo promesa de libre disponibilidad a través  de oficinas y los cajeros automáticos. Una actualización de ese análisis a la vista de los nuevos datos de reducción del mapa bancario señala que en ese horizonte de 2025 el conjunto de los ciudadanos sin acceso al dinero en efectivo será del 6,5% de la población.

Los datos recogidos por el Instituto Coordenadas indican que a finales de este año y al ritmo actual de cierre de oficinas bancarias, el número de las que permanecen abiertas al público estará por debajo de las 23.500, lo que nos retrotrae a datos de finales de los años setenta. Como ya se señalaba en ese primer estudio y se confirma en la actualización y revisión de datos efectuada por los analistas del Instituto, los esfuerzos de las entidades bancarias por ofrecer cajeros automáticos volantes, oficinas móviles y otras soluciones no han logrado superar el problema de acceso al dinero en efectivo de una población eminentemente rural que crece año tras año ahora impulsado por la crisis sanitaria que ha generado movimientos poblacionales centrífugos.

El ritmo acelerado de cierre de oficinas bancarias es mucho más rápido que el ritmo de implantación de soluciones digitales que pueden compensar la ausencia de servicios financieros presenciales, generando  que más de cuatro millones de personas en toda España vayan a quedar excluidas de facto del acceso al sistema financiero, lo que repercutirá en sus modos de vida de forma exclusivamente negativa, enfatiza el análisis del Instituto Coordenadas. Lo peor de la situación, señala el análisis, es que si no se detiene este ensanchamiento de la brecha digital en los servicios financieros, la discriminación se hará crónica y frenará cualquier política de desarrollo y protección a las capas sociales más necesitadas.

Los problemas de tipo social y económico que esta falta de acceso al efectivo está generando en amplios estratos de población se van a agudizar y sus consecuencias serán impactantes en el conjunto nacional, señala el análisis. Impedir o dificultar el acceso al dinero efectivo no hace otra cosa que incrementar la desigualdad y fomentar un reparto injusto de la riqueza. Una sociedad sin acceso al dinero en efectivo es el paradigma de la desigualdad, vuelve a recordar el análisis del Instituto Coordenadas.

El análisis del Instituto Coordenadas reitera los peligros de la tendencia al ahorro de costes instalada en buena parte del sistema financiero, de impulsar la eliminación del dinero en efectivo y su sustitución por medios de pago electrónicos. Un mundo sin efectivo incrementará notablemente el poder del sistema financiero, señala el Instituto Coordenadas, que podrá controlar todas las transacciones. No sólo eso, en un mundo sin dinero las instituciones financieras podrán rastrear cualquier operación y tendrán acceso a un caudal de información que incrementaría hasta niveles preocupantes sus opciones de control social y político.

Jesús Sánchez Lambás, Vicepresidente Ejecutivo del Instituto Coordenadas, señala que “esta actualización de nuestro análisis sobre la brecha financiera señala la relevancia del dinero en efectivo como un verdadero contrapoder en manos de los ciudadanos. Con dinero en el bolsillo un ciudadano puede comprar, vender y ahorrar sin estar completamente supeditado a las exigencias del sistema financiero y sin estar expuesto a la utilización y explotación de su intimidad comercialmente. En España la bancarización es notable, pero las redes de comunicaciones digitales no dan cobertura a amplias zonas rurales que sin cajeros ni medios digitales serán excluidas por completo del sistema y eso es algo que de ninguna manera podemos permitirnos por lesionar dos niveles claros necesitados de especial protección: mayores y migrantes”.

SOBRE EL INSTITUTO COORDENADAS DE GOBERNANZA Y ECONOMIA APLICADA

Institución de pensamiento e investigación sobre “las cuestiones de nuestro tiempo” impulsando la interacción entre gobernanza y economía aplicada para progresar en los tres pilares del mundo postmoderno: bienestar social, progreso económico con justicia social y sostenibilidad ambiental; con funciones propias de los “amigos del País” y las Sociedades de Fomento en el XIX . Fiel a sus principios fundacionales de independencia y pluralidad, el Instituto lidera la fusión entre la esencia e innovación de la liberalización económica y social, como mejor modelo de afrontar los retos presentes y futuros de país, de Europa y del mundo en una sociedad globalizada e hiperconectada.

NOTA DE INTERÉS: La información de este comunicado de prensa es un resumen de interés público proveniente de trabajos de análisis e investigación de sus miembros y colaboradores del Instituto Coordenadas para la Gobernanza y la Economía Aplicada. Los papeles de trabajo son de uso interno y de titularidad exclusiva del Instituto Coordenadas de Gobernanza y Economía Aplicada.