Repsol: Consecuencias indeseables

Análisis, 01 de abril de 2016

La caída del precio del barril de petróleo y la creencia -escasamente sustentada en la experiencia- de que las cosas ya no volverán a ser lo que fueron, ha empezado a generar la alarma en algunas de las grandes actividades deportivas que, en los últimos años, ha propiciado una extraordinaria cosecha de triunfos gracias al generoso patrocinio de Repsol, cuyo futuro está en entredicho, especialmente entre los propietarios de más del 74% de las acciones de la petrolera que cotizan en el Ibex y que ven como el rendimiento de su inversión será sustancialmente recortado.

El asunto vuelve a tomar carta de naturaleza tras la decisión de las agencias Moody's y S&P de confirmar la calificación crediticia sobre Repsol, tras las medidas adoptadas por la compañía para combatir el actual escenario del precio del crudo, entre la que se encuentra el recorte del dividendo en un 38% y una importante venta de activos.

El patrocinio de Repsol al motociclismo español, hoy en tela de juicio, ha supuesto a la marca Repsol y al deporte español innumerables éxitos, en donde los campeonatos mundiales conseguidos y los nombres de Honda, Pedrosa y Márquez, son los actuales referentes. La petrolera española y la empresa japonesa tienen un acuerdo hasta 2017.

Aunque el mantenimiento del rating por parte de Moody's y S&P es una buena noticia para Repsol, ambas agencias mantienen la perspectiva negativa al considerar, entre otros factores, la amenaza de la caída de márgenes, generación de caja y beneficios por un contexto de fuerte caída en los precios del petróleo.

Fuente: Tendencias del Dinero